Nada que celebrar.

Hoy como todos los 6 de diciembre se conmemora la Constitución Española de 1978. Pero, ¿realmente hay algo que celebrar?

Hasta hace unos pocos meses, existía el llamado consenso constitucional. A pesar de que la Constitución Española poseía un abierto carácter antidemocrático en cuanto a cuestiones como la jefatura del estado o a la confesionalidad del mismo se refiere, prácticamente la totalidad de fuerzas políticas existente en el estado español creían en ella.

Hasta hace unos meses, se tenía la percepción de que la Constitución era algo intocable, y que requería del consenso de todas las fuerzas políticas para modificarla tras un arduo proceso constituyente. Pero realmente, todo esto era una vil mentira del Partido Popular y del Partido Socialista Obrero Español, en la cual se escudaban estos dos partidos políticos para seguir manteniendo la anticuada y polvorienta Constitución Española.

En él mes de septiembre, el PP y el PSOE con el servil apoyo de UPN secuestraron el hasta entonces existente consenso constitucional con nocturnidad y alevosía. Estos partidos políticos sucumbieron a los mandatos de la UE, de los poderes económicos y de los famosos especuladores financieros, y con la reforma exprés de la constitución le impusieron un carácter abiertamente neoliberal.

Estos partidos que presumen ser democráticos, no tuvieron ni la valentía ni la honradez necesaria para refrendar su antidemocrático reformazo con un Referéndum en el que la ciudadanía del estado español manifestara su opinión al respecto.

Tras la citada devaluación de la Constitución Española, llegamos a hoy día 6 de diciembre, día en el que los miembros del PP y del PSOE se visten con la chaqueta demócrata y acuden en manada al Congreso de los Diputados a festejar tan honorable fecha. Y yo me pregunto, ¿estos apasionados de la democracia y de la Constitución Española han perdido alguna vez su tiempo en leer la citada constitución?, yo creo que no. Si realmente conociesen tal constitución, sabrían que esta reconoce el derecho al trabajo (en la actualidad existen casi 5.000.000 de parados en el estado español) o que también reconoce el derecho a una vivienda digna (en la actualidad más de 15.000 familias son desahuciadas cada trimestre).

Como muy bien ha dicho hace unas horas Cayo Lara (Coordinador General de Izquierda Unida), la actual Constitución no es más que “papel mojado” por lo quelos ciudadanos del estado español no tenemos nada que celebrar.

Nosotros los republicanos olvidémonos de esta insignificante fecha y sigamos conmemorando la Constitución Española de 1931, la cual a pesar de ser 47 años más antigua que la actual, es mucho más avanzada en cuanto a valores democráticos se refiere.

Abramos de una vez por todas un proceso constituyente verdaderamente democrático en el que la Constitución que surja este al servicio de la ciudadanía, garantice derechos en vez de reconocerlos, y reconozca la plena igualdad de todos los ciudadanos del estado español, en definitiva, avancemos hacia la III República Española.